Hoteles en Saint-Etienne

Capital del departamento de Loira en Ródano-Alpes, Saint-Étienne es una ciudad que combina sus atractivos históricos con su creciente y fuerte economía industrial. Sus habitantes, conocidos como “stefanianos”, suelen presumir con orgullo de su arquitectura y su pasado sin dejar de la lado la apuesta por la innovación y el progreso. Su tradición metalúrgica e industrial data del siglo XV. Antes de que llegase la Revolución Industrial la ciudad ya se había convertido en un fuerte centro de producción de metalurgia pesada y explotación del carbón. Cabe mencionar que su buena infraestructura en medios de transporte deriva de su crecimiento industrial: era imperante transportar el carbón hasta el río Loira para luego desembocar en el Atlántico.

Como la gran parte de las ciudades europeas, Saint-Étiennez también fue víctima de la destrucción producto de la Segunda Guerra Mundial. La ciudad sufrió ciertos daños durante el avance americano contra las fuerzas nazis, quienes habían ya monopolizado la industria de la ciudad. No obstante, hoy día es distinguida por su belleza y atractivo general. Disfrute la ciudad al hospedarse en Hotel Kyriad Saint-Étienne Centro.

A pesar de contar con una sólida industria metalúrgica, Sain-Étienne se distingue por su patrimonio arquitectónico característico de los siglos XIV y XX. Gracias a ellos, la ciudad ha sido reconocida con el distintivo de “Ciudad de Arte e Historia”. Al recorrer el casco antiguo encontrará monumentos tan emblemáticos como la Torre de la Drogerie, el Ayuntamiento, la Prefectura e incluso el puente ferroviario considerado como el más viejo de Europa.

Uno de los grandes atractivos de Saint-Étienne son definitivamente sus áreas verdes y parques, donde los locales pasan gran parte de su tiempo libre. Entre los más importantes destacan el Jardín de Plantas y el Parque Europa.

Definitivamente, al visitar Saint-Étienne no puede dejar de visitar la Catedral de San Carlos, una joya del neogótico temprano. Las construcciones se iniciaron en 1912 y a la fecha todavía no ha sido terminada. En contraste, la Gran Iglesia, fundada en el siglo XV, se caracteriza por su estilo gótico clásico.

Al visitar Saint-Étienne podrá optar por múltiples medios de transporte que le permitirán el acceso a la ciudad desde cualquier punto de Francia. La cercanía con Lyon facilita las conexiones desde otros puntos de Europa, a tan sólo 2 horas por carretera. Desplazarse en tren es igualmente práctico y común. Lyon se encentra a 50 minutos y hay aproximadamente 80 conexiones diarias entre ambas ciudades.

En relación con el transporte, no pierda la oportunidad de descubrir el Museo de los Transportes Urbanos de Saint-Étienne, muestra del ingenio y creatividad de su gente.

La tradición culinaria de Saint-Étinne merece el mismo respeto y consideración que su patrimonio cultural y comercial. Entre las especialidades locales le recomendamos probar los bugnes, un tipo de buñuelo, el sarason o queso blanco y el rapée, galletas de papas condimentas con especias, sal y pimienta.

Consulte más información sobre la localidad en la siguiente página web:
http://www.saintetienne.com/
http://es.rendezvousenfrance.com/es/descubre/en-saint-etienne